Por qué necesitas un Sistema de Gestión de la Energía en tu empresa?

Ni tu ni las organizaciones individuales pueden controlar los precios de la energía, las políticas del gobierno o la economía global, pero sí se puede mejorar la planificación energética y la forma de gestionar la energía.

En los últimos años las empresas de nuestro país han adoptado la normativa internacional en sistemas de gestión de calidad (ISO 9.001) y medio ambiente (ISO 14.001), siendo ya éstas familiares para la mayoría de las empresas implementando un ciclo de mejora continua. Sin embargo, la norma ISO 50.001 de sistemas de gestión la energía, ha tenido menor calado en el tejido industrial.

Certificación ISO 50001. Mucho más que un simple certificado Si pensamos en las mayores cargas económicas para las empresas, la gestión energética sobrepasa con holgura el coste de los productos no aptos para venta o de la gestión de residuos peligrosos para el medio ambiente.

Por eso, mejorar el rendimiento energético de tu empresa con una planificación energética adecuada, te proporcionará beneficios rápidos, mejorando el uso de tus fuentes de energía y reduciendo tus consumos.

Para ello la implantación de un Sistema de Gestión de la Energía (SGEn) es la opción con mayor potencial de ahorro energético y económico, convirtiendo la implantación de la norma ISO 50.001 en una inversión y no en un simple certificado.

Pasos para implantar tu Sistema de Gestión de la Energía (SGEn) con éxito Para que tu Sistema de Gestión de la Energía (SGEn) tenga éxito, debe ser parte de la estrategia de desarrollo y política energética de tu organización y tener una vinculación con tus objetivos y metas.

Por ejemplo, si tu empresa tiene una meta de incrementar la producción, seguramente tendrás mayor consumo de energía, por lo tanto la medición y mejora de desempeño energético debiera incorporarse en los procesos de planificación energética, de acuerdo a la estrategia de tu organización

La implantación de la norma ISO 50001 supone una oportunidad para que descubras y aproveches el potencial de ahorro en materia de consumos de energía que tiene tu empresa y puedas definir tú y tu equipo las prácticas, políticas energéticas y comportamientos futuros para mantener un alto nivel de eficiencia.

Política energética: declarando las intenciones y objetivos del Sistema de Gestión de la Energía (SGEn).

Planificación energética: paso primordial a la hora de iniciar el ciclo, ya que te debe servir para definir la situación actual de tu empresa mediante una auditoría interna o externa.

Implementación y operación: formación, concienciación y aplicación del Sistema de Gestión de la Energía (SGEn) en cada uno de los departamentos de tu empresa.

Verificación: control interno de la evolución de los consumos de tu empresa a través de monitorización y auditorías energéticas periódicas realizadas por personal propio o externo.

Revisión por tu dirección: tras analizar los datos obtenidos deberemos cambiar tu política y planificación energética en consecuencia, actualizando las variables de control y fijando nuevos objetivos periódicamente.